El monasterio de Samos, ubicado en uno de los tramos más importantes del Camino de Santiago, es una abadía benedictina con una antigüedad de 1500 años, una de las más antiguas de España.
El monasterio de Samos se asienta en el extremo norte de la capital del municipio (Samos, Lugo), y a esta villa y al municipio les cedió su nombre e historia. Situado junto al río Sarria, que roza sus muros, atrae la atención del visitante no solo por sus vastas proporciones, sino, sobre todo por sus sólidos y austeros edificios, construidos con mampostería de pizarra. La rusticidad y la sencillez de los muros exteriores contrastan con la nobleza y la elegancia de sus claustros de piedra de granito.
Integran el complejo monástico dos claustros de dimensión desigual, unidos entre si y flanqueados por achatados torreones. Adosados al claustro grande por la parte noroeste, se encuentran su magnífica iglesia y su esbelta sacristía. Tres estilos arquitectónicos intervienen en su construcción y ornato: gótico, renacimiento y barroco. Solamente se conservan como reliquias de un pasado multisecular, una portada y otros elementos aislados de inspiración románica.
La abadía de Samos cuenta con una hospedería donde el peregrino puede encontrar la paz y el descanso necesarios para proseguir con el ancestral y arcano camino de la Vía Láctea, que con el tiempo y su cristianización terminó por llamarse Camino de Santiago.
Página web del monasterio: http://www.abadiadesamos.com/